Terapias Infantiles: técnicas y beneficios

Terapias Infantiles: técnicas y beneficios

Las terapias infantiles generan una amplia variedad de beneficios para los niños, ya sean físicos, mentales o emocionales. Estas terapias son diseñadas para ayudar a los niños a desarrollar habilidades y lograr el éxito en la vida. 

Las terapias infantiles pueden ayudar a los niños a superar desafíos relacionados con el desarrollo, como el retraso en el habla, problemas de comportamiento, problemas de aprendizaje o dificultades emocionales. También pueden ayudar a los padres a desarrollar habilidades para mejorar la comunicación con los hijos y para apoyar el desarrollo del niño.

Las terapias infantiles incluyen una variedad de enfoques, como terapia ocupacional, terapia física, terapia del lenguaje, terapia cognitivo-conductual, terapia de juego, terapia de grupo, terapia de familia y otros. Estas terapias se pueden aplicar individualmente o en grupo, dependiendo del problema que se esté tratando. 

Además, los padres también pueden buscar terapia para aprender a cómo mejorar su relación con sus hijos y cómo apoyar mejor su desarrollo. Esto ayudará a los padres a sentirse más seguros y cómodos cuando participen en actividades con sus hijos.

Los trastornos psicológicos, emocionales y de conducta durante la infancia son una fuente de problemas a largo plazo que afectan al bienestar y la salud infantil, a las familias e incluso a la población en general. 

Atender los desórdenes psicológicos infantiles lo antes posible permite a los niños disminuir los problemas en casa, en la escuela o en la relación con sus amigos. Además, también puede ayudar al desarrollo saludable en la vida adulta.

¿Por qué necesitan terapia los niños? 

El propósito de la terapia psicológica consiste en tratar un trastorno de salud mental o bien ayudar a un niño o niña a gestionar los síntomas de forma que pueda desenvolverse correctamente en casa, en el colegio así como en la sociedad.

Es habitual que, cuando los niños/as son jóvenes, se incluyan en la terapia a sus padres. En ocasiones, los terapeutas sólo trabajan con los padres. Asimismo, cuando los niños son mayores, el terapeuta puede reunirse sólo con ellos. 

En algunos tipos de terapia hay que trabajar conjuntamente con toda la familia y otros adultos relevantes para el niño (por ejemplo, un maestro).

Estos son algunos ejemplos acerca de cómo conseguir terapias infantiles efectivas

Terapias infantiles efectivas

Nada más y nada menos que 1 de cada 5 niños como adolescentes puede presentar una alteración mental detectable que requiera ser tratada. Por lo menos 1 de cada 10 presenta un trastorno psicológico grave.

Las terapias infantiles sirven de ayuda para resolver muchos de estos trastornos. El tratamiento infantil ofrece ayuda a los menores con distintos problemas, como ansiedad, depresión, trastorno de la conducta, hiperactividad, déficit de atención (TDAH), etc…

Los indicios de los problemas

Entre las señales de advertencia que indican que el niño podría necesitar terapia psicológica figuran las siguientes:

  1. Un sentimiento de tristeza o de desesperación persistente.
  2. Enojo constante y propensión a exagerar las situaciones.
  3. La preocupación, la ansiedad o el pánico permanente.
  4. Inquietud por las enfermedades físicas o su propio aspecto.
  5. El temor a que alguien pueda controlar su mente o que esté «fuera de control».
  6. Una bajada repentina e injustificada de las notas en la escuela.
  7. Falta de interés por actividades que antes le gustaban.
  8. Alteraciones en los hábitos de sueño o de la alimentación.
  9. Aislamiento, con preferencia por permanecer solo en lugar de en contacto con amigos o familiares.
  10. Escuchar voces que no existen.
  11. Pensamientos de suicidio.
  12. Imposibilidad de concentración, de pensamiento claro o de tomar decisiones.
  13. La incapacidad de permanecer sentado.
  14. Ejecución obsesiva de las rutinas a lo largo del día, tales como lavarse las manos o la limpieza de las cosas.
  15. Experiencia de pesadillas regulares.
  16. El consumo de alcohol o drogas.
  17. Seguir dietas o comilonas obsesivas acompañadas de vómitos o ingestión de laxantes.
  18. Cometer actos violentos, como encender fuego o asesinar animales.

Cuando un niño o un adolescente muestra algunos de estos signos, es muy probable que necesite terapia. La psicoterapia infantil puede resultar muy provechosa, sobre todo si se descubre el problema de forma anticipada.

¿Qué tipos de terapias infantiles son más efectivas en niños?

La terapia del dibujo

Algunas técnicas de psicoterapia infantil incluyen la terapia de juego, la terapia de dibujo, la terapia de entrenamiento en habilidades sociales y la terapia cognitivo-conductual.

No hay una respuesta definitiva a esta pregunta, ya que la efectividad de las terapias infantiles depende en gran medida del niño y de su situación particular. 

Algunos niños responden mejor a los juegos y el movimiento, mientras que otros pueden responder mejor a las terapias de habla o de lenguaje.

Muchos problemas de salud mental pueden surgir entre los niños, y la terapia aparece de varias formas. Entre las formas de asesoramiento para niños y los desórdenes que éstas pueden contribuir a tratar se hallan las relacionadas con los siguientes aspectos:

Terapia cognitivo-conductual

En este tipo de terapia, se les enseña a los niños como sus propios pensamientos afectan a su estado de ánimo y a su conducta. 

Se les enseña a identificar los pensamientos negativos o erróneos y a tratarlos. Esta terapia es útil para tratar desórdenes del estado de ánimo tales como la ansiedad y la depresión.

La terapia de dibujo

Esta forma de psicoterapia infantil en la que los niños expresan sus sentimientos y pensamientos a través del dibujo. El dibujo se utiliza como instrumento auxiliar de la comprensión y resolución de los problemas infantiles.

Terapias infantiles basadas en el juego

Es una forma de psicoterapia en la que los niños expresan sus sentimientos y pensamientos a través del juego. Los terapeutas utilizan el juego como un medio para ayudar a los niños a comprender y resolver sus problemas.

Se dan juguetes a los niños para que puedan jugar y el psicoterapeuta les observa para entender mejor sus problemas emocionales o de salud mental. Diferentes tipos de juego ayudarán al niño a detectar sus emociones así como a expresarlas. 

La terapia del juego puede ser útil para los niños que padecen depresión o ansiedad debido a que tienen que afrontar problemas vitales tales como el divorcio o la pérdida de un ser cercano.

La psicoterapia psicodinámica

Se trata de la versión adaptada a los niños de la clásica «cura hablada», en la cual un psicoterapeuta les ayuda a descubrir los aspectos que influyen en la manera de pensar o comportarse de un niño. 

Esta terapia se basa en la premisa de que el funcionamiento del niño puede mejorar una vez que sus dificultades internas han salido a la luz. 

Esta terapia puede ayudar a un niño que padece ansiedad o depresión, que se enfrenta a un desorden alimentario o que se desvive por un comportamiento desordenado.

Terapia conductual

Esta modalidad de terapia para niños se distingue de la terapia cognitivo-conductual por el hecho de que se centra en la alteración de la conducta. 

Los comportamientos que necesitan ser desanimados o fomentados se identifican, y después los padres trabajan para modificar los factores del entorno que favorecen estos comportamientos y también para proporcionar instrucciones para los hábitos deseados o no deseados. 

Tratamiento de los niños con TDAH

Este método es útil para el tratamiento de los niños con TDAH, además de otras patologías para las que se desee realizar una modificación de la conducta.

Si su hijo parece tener un determinado trastorno, le recomendamos que se ponga en manos de su médico o especialista en psicología infantil. Prestarle una atención rápida podrá ayudarle a solucionar los inconvenientes a los cuales se somete y a que tenga una niñez más feliz y más saludable.

La terapia de entrenamiento

En habilidades sociales es una forma de psicoterapia infantil en la que los niños aprenden y practican habilidades sociales como el manejo de las emociones, la solución de conflictos y el establecimiento de relaciones positivas. 

Conclusión sobre las ventajas de las terapias infantiles

La educación es difícil y a los padres nadie los enseña a realizar esta labor, así como tampoco contamos con un libro de instrucciones para realizar dicha tarea tan relevante. Es posible que existan momentos durante el desarrollo y crecimiento para nuestro hijo en los cuales desconocemos la forma de ayudarlo para que resuelva sus dificultades.

Por ello, resulta importante que en esos instantes solicitamos ayuda que le acompañe y le haga crecer y obtener herramientas con las que se proteja y se desarrolle con éxito en el presente y también en el futuro.

En resumen, las terapias infantiles tienen muchas ventajas que pueden ayudar a los niños y sus familias a tener una mejor vida. Estas terapias son una excelente herramienta para mejorar la calidad de vida de los niños, al ayudarlos a desarrollar habilidades para relacionarse con los demás, mejorar su comportamiento, y tener una mejor autoestima.

Contacta con especialistas para obtener los mejores resultados para tu hijo.